Ignatius Maternowski, un sacerdote paracaidista en Normandia

Ignatius Maternowski, paracaidista de la 82 División Aerotransportada, se convirtió en el único  sacerdote católico que perdió la vida durante las operaciones del Desembarco de Normandía.

Nacido el 28 de marzo de 1912 en Holyoke, Massachusetts, el joven Maternowski decidió ingresar en la orden de los Franciscanos Conventuales donde pronunció sus votos simples en 1932. Ocho años después, en 1938, fue ordenado por el obispo Thomas O’Leary de la diócesis de Springfield.  No obstante, no sería hasta 1942, mientras desempeñaba sus labores en una parroquia de Buffalo (New York), que ingresaría como capellán en el Ejército norteamericano. En julio de aquel mismo año, tras obtener el permiso eclesiástico, se ofreció como voluntario para ingresar en el 508.° Regimiento de Infantería de Paracaidistas de la 82.° División Aerotransportada (508PIR 82 Airborne). Tras el preceptivo periodo de entrenamiento, obtuvo el grado de capitán y aterrizó en Irlanda e Inglaterra donde formó parte del contingente aliado destinado a la Operación Overlord.

 

Padre Ignatius Maternovski

Entrada en acción

El 6 de junio de 1944, el padre Maternovoski saltó junto a sus compañeros sobre la aldea de Guetteville, en la ciudad de Picauville. Nada más aterrizar, observó los restos de un planeador norteamericano estrellado y se dirigió hacia el lugar donde prestó ayuda a los supervivientes. Lamentablemente, el equipo sanitario que portaba no cubría las necesidades de los heridos por lo que se adentró en las líneas germanas en busca de ayuda. Su estrategia pasaba por negociar con sanitarios enemigos para tratar a lesionados de ambos bandos en un hospital común.

Desarmado, luciendo su insignia de capellán y un brazalete de la Cruz Roja, se encaminó hacia un puesto germano donde se reunió con un oficial médico. Al regresar a sus líneas, un francotirador alemán le disparó por la espalda. Los cruentos combates existentes impidieron que sus compañeros recuperasen su cuerpo sin vida hasta al cabo de tres días. En un primer instante fue enterrado cerca de Utah Beach, aunque en 1948 sus restos mortales fueron repatriados a Estados Unidos, donde fue enterrado en el Mater Dolorosa Cemetery, South, Hadley Massachusetts.

 

Memorial Padre Ignatius Maternovski en Guetteville, Francia

Fuentes de la fotografía: Findgrave, companionsofstanthony

Fuentes del texto: https: uswarmemorials, companionsofstanthony, franciscanvoice

6 comentarios en «Ignatius Maternowski, un sacerdote paracaidista en Normandia»

  • el diciembre 28, 2022 a las 7:55 pm
    Enlace permanente

    Estoy totalmente de acuerdo con Jose Antonio Yanez !!

    Gracias por compartir estas historias poco conocidas, pero con el mismo gran valor que las mas reconocidas !!

    Saludos !!

    Respuesta
    • el enero 1, 2023 a las 10:05 pm
      Enlace permanente

      Gracias a vosotros por leerlas. Un saludo.

      Respuesta
  • el octubre 28, 2022 a las 3:51 pm
    Enlace permanente

    conmovedor este relato pero más conmueve la valentiá de este soldado prelado y más aún su espírito patriota he leido algunas otras cosas sobre actos de valor de sacerdotes en la guerra, me conmueve mucho su espíritu patriota su disposición de animo para ayudar a los demás a riesgo de su propia vida; son un verdadero ejemplo de valor desprendimiento , amor y solidaridad con los que sufren. pareciera que el seminario forjara sus caracteres. agradecido an quien haya publicado ese relato y lo exorto a continuar divulgando esas historias poco conocidas.

    Respuesta
    • el octubre 29, 2022 a las 6:01 pm
      Enlace permanente

      Muchas gracias, José Antonio. La Segunda Guerra Mundial está repleta de historias desconocidas que merecen su rescate. Un saludo.

      Respuesta
  • el octubre 12, 2022 a las 11:42 am
    Enlace permanente

    Hola.

    Qué interesante historia, desconocida para mí. Pobre hombre, no se merecía haber muerto y menos de esa forma tan traicionera. Al menos, no debió de sufrir.

    Gracias por vuestra labor divulgativa.

    Un saludo desde Oviedo,

    Alberto

    Respuesta
    • el octubre 14, 2022 a las 10:16 am
      Enlace permanente

      Muchas gracias por tu comentario, Alberto. Un saludo.

      Respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *